Cuando se trata de decorar, muchas cosas nos vienen a la mente: mobiliario, ornamentos, pintura, y la lista puede ser interminable. Sin embargo, hay una cosa que definitivamente debe de estar en el diseño de todos los hogares, no solo por la vitalidad que ofrecen al ambiente, sino también por su hermosa vista y energía: las plantas.
Te presentaremos algunas opciones de cómo puedes incorporarlas en tu sala de estar, la manera de combinarlas, y algunos detalles sobre flores, su cuidado, así como la posibilidad de colocar plantas artificiales o naturales.
Flores delicadas
Comencemos por lo simple. En cualquier tipo de espacio, sin importar el tamaño, las flores suelen venir bien. En este caso eligieron un ramo sencillo, pero muy colorido, que se compagina perfecto con el estilo minimalista del cuarto.
Enmarcando un área particular
En esta sala hay un gran ventanal, que se encuentra enmarcado por dos plantas tipo helechos, sumamente frondosas. Debido a que estas tienen distintas alturas, generan un dinamismo muy interesante.
Paleta de colores perfecta
Si optas por un diseño colorido, lo mejor que puedes hacer es incluir flores o plantas que cuenten con los colores de tu paleta elegida. La sinergia generada será exquisita.
Unidas de manera paralela
Si bien no tiene que ser la misma flor, colocar dos ramos separados en distintas habitaciones, conectadas a la vez, te ayudará a unificar el área. La sala y el comedor se hacen uno con ambos arreglos al frente y al fondo. Al ser de menor altura, puedes colocar más flores en la mesa de café.
Pop de color
La ventaja de colocar plantas en la sala, sobretodo cuando en ésta prevalecen los colores neutros o tierra, es que se generará un contraste de color de forma instantánea. Basta con una pequeña planta al centro, para avivar la habitación.
Esquinadas y solitarias
Si solo quieres agregar un pequeño detalle natural, sin ocupar demasiado espacio, puedes ubicar una maceta alta, con una flor, encima de la mesa esquinera. Sutil y bonito.
Arriba y abajo
En salas con techos altos, colocar plantas trepadoras es una decisión inteligente, pues solo bastan algunas macetas para convertir el espacio en un oasis verde. Si tienes la posibilidad de colocar un doble techo o tapanco, ¡increíble!
Como pieza artística
En salas de gran tamaño se puede construir un jardín interior. Tenga techo o no, un pequeño sitio así le dará un fondo precioso a tu mobiliario.
Gran recibimiento
Una sencilla triada de tulipanes u orquídeas, por ejemplo, alegrará a tus visitantes al entrar a tu casa. Pon un espejo detrás para profundizar la dimensión.
En varias superficies
Además de poner la típica planta en la mesita de café, ¿por qué no ir más allá y colocar patrones naturales? Al poner un tapete con hojas de palma verás como tu sala adoptará la sensación tropical que todos buscamos cuando vamos a la playa.
Diviértete probando nuevos estilos hasta encontrar cómo te quedan mejor. Si tienes tiempo de cuidarlas, date la oportunidad de probar con plantas o flores naturales. Por el contrario, si prefieres no meterte en esos rollos, la oferta de plantas artificiales es vasta, así que seguro encontrarás algo adecuado para ti.