Una soldadora tipo inversor es una clase de soldadora que tiene más ventajas que una soldadora convencional, puesto que tienen una tecnología sofisticada en comparación con los transformadores de aluminio de los soldadores tradicionales.
La ventaja primordial es su tamaño ya que es pequeño, compacto y de una u otra forma el peso es ligero y portátil. Además, consumen menos energía y pueden operar normalmente con corriente local, bajo poder de consumo significa que puede funcionar a 110 V.
Son máquinas soldadoras que también convierten la corriente alterna de la red en corriente continua, pero en lugar de emplear un transformador-rectificador, la conversión se efectúa mediante una placa electrónica.