La soldadora es un accesorio indispensable para muchos sectores laborales, como es el caso de los talleres electrónicos y de los talleres mecánicos, lugares donde continuamente se deben unir dos piezas metálicas a partir del fundido de otro material, que va a facilitar la juntura de las mismas. Hay muchas versiones de soldadoras, pero la más cotizada es la que funciona a base de gasolina y que es muy común para las tareas de joyería, es decir, se trata de un modelo requerido por los artesanos para sus labores de orfebrería. La soldadora eléctrica también es muy común, lo mismo que la industrial, que implica métodos como el capilar, el fuerte y el blando.